Enfermedad celiaca

celiacos

La enfermedad celiaca es un trastorno poco común causado por intolerancia al gluten, un componente del trigo, el centeno, la cebada la avena, así como granos híbridos como el triticale y el kamut. La causa se desconoce, aunque sí se sabe que afecta principalmente a personas caucásicas de origen europeo. En las personas que tienen enfermedad celiaca el consumo de gluten provoca daños al intestino delgado. El cuerpo responde al gluten como si éste fuera un antígeno y al ser absorbido por le intestino lanza un ataque al sistema inmunológico. La vellosidad que recubre el intestino delgado sufre daño y destrucción, lo cual afecta a la capacidad del organismo de absorber nutrientes vitales. La malabsorción se convierte en un problema grave y la pérdida de vitaminas, minerales y calorías conduce a la malnutrición, a pesar de una dieta adecuada. La diarrea complica aún más el problema. Como la enfermedad celiaca altera la digestión, pueden desarrollarse alergias a algunos alimentos.

La enfermedad celiaca afecta tanto a los adultos como a los niños y puede presentarse a cualquier edad. Suele aparecer cuando al niño se le dan cereales por primera vez, alrededor de los tres o cuatro meses de edad. En otros casos, la enfermedad puede sobrevenir por estrés emocional o trauma físico, como el embarazo o una operación quirúrgica. Los primeros síntomas son diarrea, pérdida de peso y deficiencias nutricionales, como anemia. Otros síntomas son náuseas, inflamación abdominal; deposiciones abundantes, fétidas y a menudo pálidas y/o ligeramente amarillosas que flotan; depresión, fatiga, irritabilidad, calambres musculares y pérdida muscular, y dolor en las articulaciones y/o en los huesos. Los infantes y los niños pueden presentar problemas de crecimiento, vómito e intenso escozor en la piel, al igual que una erupción cutánea roja y pruriginosa llamada dermatitis herpetiforme. Los bebés que tienen enfermedad celiaca suelen perder peso o aumentar de peso más lentamente de lo normal. Los infantes pueden presentar inapetencia, gases y deposiciones fétidas. Además, se ven anémicos y mal nutridos, y se le pueden desarrollar úlceras en la boca.

Como ésta es una enfermedad muy poco frecuente y muchos síntomas se asemejan a los de otras enfermedades, a menudo diagnostican mal la enfermedad celiaca. Por ejemplo, se suele diagnosticar equivocadamente como síndrome de intestino irritable, úlceras gástricas o anemia. Muchas personas deben esperar largo tiempo antes de obtener un diagnóstico correcto, siendo el tiempo promedio unos once años. Los avances en las técnicas para analizar la sangre han facilitado su detección. La diagnosis por análisis sanguíneo debe ir seguida de una biopsia de tejidos intestinales, la cual se suele practicar normalmente en régimen ambulatorio, sin necesidad de estancia en el hospital. La enfermedad celiaca es hereditaria; si un miembro de la familia la tiene, el resto de los miembros debería someterse a pruebas para determinar si también la sufren o no.

La enfermedad celiaca es mucho más común de lo que se creía, y afecta a 2,2 millones de estadounidenses. Investigaciones llevadas a cabo por el Programa de la enfermedad celiaca de la Universidad de Chicago indican que 1 de cada 133 personas sanas en apariencia puede estar afectada. Entre aquellos que tienen síntomas asociados a ella la proporción puede llegar a 1 entre 56. (La incidencia puede ser mayor en muchas zonas de Europa.)

No se conoce cura para esta enfermedad, pero puede controlarse si se mantiene una dieta sin gluten de por vida.

Hierbas

  • La alfalfa suministra vitamina K, de la cual suelen presentar deficiencia las personas que sufren de enfermedad celiaca. Tome entre 2.000 y 3.000 miligramos al día en tableta.
  • El extracto de hoja de olivo y/o el sello de oro son buenos para controlar las infecciones.
    Advertencia: No tome sello de oro (hidrastis, hidrastis del Canadá, sello de oro) todos los días durante más de una semana seguida y nunca durante el embarazo. Si tiene antecedentes de enfermedad cardiovascular, diabetes o glaucoma, tome sello de oro sólo bajo supervisión médica.

Recomendaciones

  • Consuma vegetales frescos, legumbres (como lenteja, judia y garbanzo), arroz, nueces, semillas de girasol, pasas, higos, y frutas con "semillas" como fresas, frambuesas y moras
  • Incluya en su dieta miel de caña, que es rica en hierro y vitamina B. Las personas que tienen enfermedad celiaca necesitan fibra y alimentos ricos en hierro y en vitaminas B.
  • No consuma productos dulces, alimentos procesados, productos lácteos, cubos para preparar consomé, chocolate ni aderezos embotellados para ensalada.
  • Como la enfermedad celiaca afecta a la absorción de las vitaminas B y de las vitaminas solubles en grasa (A, D, E y K), es preciso tomar estos nutrientes. Es importante saber que el gluten se encuentra en muchos suplementos nutricionales. Lea las etiquetas cuidadosamente y compre sólo suplementos hipoalergénicos, libres de trigo y levaduras.
  • Cuando un niño presente síntomas de enfermedad celiaca, retírele de la dieta todos los alimentos que contengan gluten y observe si mejora. También suspéndale la leche, pues con la enfermedad celiaca suele desarrollarse intolerancia a la lactosa. La enfermedad puede presentarse en los primeros meses de vida, dependiendo de la dieta del niño.
  • Evite absolutamente todos los alimentos que contengan gluten. No consuma productos que contengan cebada, avena, centeno ni trigo. Sí puede comer, en cambio, arroz y maíz. Reemplace la harina de trigo por arroz, papa, harina de maiz y harina de soja. Lea con detenimiento todas las etiquetas. Esté atento a las fuentes "ocultas" de gluten, como proteína vegetal hidrolizada, proteína vegetal texturizada y todos los derivados del trigo el centeno, la avena y cebada (incluyendo malta), almidon modificado y a las salsas.

Aspectos para tener en cuenta

  • Si su hijo tiene problemas de. desarrollo podría sufrir de esta enfermedad. Entre sus manifestaciones están irritabilidad, fatiga y/o cambios en el comportamiento, y no siempre hay problemas digestivos. De todos modos, la enfermedad se expresa de forma distinta en cada persona.
  • Cuando se sospeche que existe enfermedad celiaca, una biopsia intestinal permite hacer un diagnóstico definitivo.
  • Cuando a un niño se le llena el cuerpo de vesículas y úlceras se le deben hacer exámenes para determinar si se trata de enfermedad celiaca.
  • Diversos estudios sugieren que las personas con enfermedad celiaca pueden consumir avena. Sin embargo, la avena se mezcla con frecuencia con otros cereales y es difícil determinar si la avena que se va a consumir está libre de gluten. Siga en este punto lo que le recomiende su médico o su dietista.
  • Es posible que haya que eliminar los productos lácteos de la dieta debido a una deficiencia secundaria de lactasa.
  • El Dr. Martin F. Kagnoff„ de la Universidad de California en San Diego, afirma que la herencia es un factor crucial en el desarrollo de esta enfermedad. También sostiene que el esprúe a veces se contrae en la infancia pero se desvanece en la adolescencia, y que en algunos casos vuelve a aparecer en la tercera o cuarta década de la vida.
  • Entre los factores que pueden desencadenar la enfermedad celiaca están estrés emocional, trauma físico, infección viral, embarazo o cirugía.
  • La deficiencia de vitamina K producida por la enfermedad celiaca puede conducir a hipoprotrombinemia (falta de factores de coagulación en la sangre). Las bacterias "amigables" del intestino producen una forma de vitamina K; otra forma de vitamina K se encuentra en algunos alimentos, especialmente en vegetales hojosos, alfalfa, tomate, fresa, granos enteros y yogur. Las bacterias del yogur y el acidophilus ayudan a restablecer la flora intestinal necesaria para la producción de vitamina K.
  • Un informe publicado en la revista médica inglesa The Lancet se refirió a una posible relación entre la enfermedad celiaca y la epilepsia. Teorías sobre la relación entre las dos enfermedades postulan que el gluten del trigo produce sustancias parecidas a las endorfinas que podrían afectar al metabolismo cerebral. Otra posibilidad es que la enfermedad celiaca aumente la permeabilidad intestinal, lo que a su vez facilita la absorción de sustancias que podrían afectar a la química del cerebro.
  • Por la deficiencia de lactasa que produce la enfermedad celiaca, puede ser necesario retirar de la dieta la leche y los productos a base de leche.
  • Se ha observado que la esquizofrenia es más frecuente entre las personas que sufren de enfermedad celiaca.
  • Para obtener más información sobre la enfermedad celiaca, comuníquese con la Fundación de la enfermedad celiaca.

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